
Un encuentro celebrado en el Palacio de Boadilla del Monte, que rubricó así la puesta en valor del citado Parque y, por extensión, de los lugares que abarca, como ejemplo de una buena gestión del patrimonio natural tanto a nivel de fauna, como en relación a los recursos renovables y sus aprovechamientos.
Este Parque Regional se convierte así en el primer enclave natural de la Comunidad galardonado por esta iniciativa que, desde 2003, evalúa la gestión del paisaje, la fauna, los recursos naturales renovables y los aprovechamientos. En España ya hay un centenar de territorios reconocidos con esta etiqueta de calidad, que abarcan 645.000 hectáreas. En total, esta etiqueta está presente en 18 países, con 272 territorios reconocidos que cubren 1,6 millones de hectáreas.
El ecosistema general predominante en el parque es el bosque mediterráneo. En él se incluyen los bosques de encinas, las dehesas de encina y fresno, los pinares de pino piñonero, las zonas de matorral, las formaciones herbáceas de pastizal, los cultivos tradicionales y las zonas de repoblación, sin olvidar los bosques de ribera, eje principal del parque.
En cuanto a la fauna, el Parque alberga el 40 % de las especies de la Península, el 60 % de la fauna invertebrada y el 45 % de la vertebrada de la región, y habita el 85 % de los mamíferos presentes en la Comunidad y el 45 % del total en España.
Suelta de dos águilas imperiales ibéricas en el Parque
El Parque Regional ha acogido también la suelta de dos águilas imperiales ibéricas, tras ser recuperadas por los técnicos de la Comunidad de Madrid en el Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS) que el Gobierno regional tiene en Tres Cantos.
El consejero ha recordado que la Comunidad de Madrid impulsa un Plan de Recuperación del Águila Imperial Ibérica, con medidas para la protección en la región de esta especie catalogada en peligro de extinción tanto a nivel autonómico como nacional. Este Plan tendrá el objetivo de promover e impulsar las acciones necesarias para que esta especie alcance un tamaño de población y un estado de conservación tales que permitan reducir su nivel de amenaza.
La población de águila imperial ibérica en la Comunidad se ha triplicado desde 1986 y duplicado desde 2009. El año pasado se localizaron seis parejas nuevas, por lo que su censo en la región se eleva a 65 parejas con 87 pollos volados. En concreto, 35 de estas parejas se han localizado en nuevos territorios ocupados a lo largo de los 11 últimos años. Pese a ello, diversas amenazas hacen necesario un Plan de Recuperación para esta especie.