
El Ayuntamiento entrega sus distinciones honoríficas para poner nombre propio a quienes con su esfuerzo, trabajo y superación contribuyen a que Valdemorillo crezca y mejore “como pueblo abierto, pujante y capaz de ilusionar a todos”
En esta ocasión, son tres los títulos de Hijos Adoptivos entregados, dos de ellos a título póstumo, los otorgados a la ilustre científica Margarita Salas y a Fernando García por su labor como boticario que atendió a varias generaciones de valdemorillenses, mientras que Pepa Garrido lo recogió viendo así aplaudida una vez más su gran labor en pro de la cultura y tradiciones locales
Esperanza Nogal recibió su título como Hija Predilecta, ‘recompensa’ merecida tras más de 40 años regentando su quiosco de prensa, a pie de calle.
Y completando el cuadro de honores, la Medalla al Mérito Deportivo que ha ido a manos de la jovencísima Adriana San Román, la ciclista que tanto eleva el pabellón local en los sucesivos podios que va cosechando, tres de ellos ya como campeona de España en su categoría
Las emociones marcaron el acto de entrega de distinciones que en la tarde de este 2 de febrero ha puesto los focos en los nuevos Hijos Adoptivos, en una nueva Hija Predilecta y en una joven que reúne méritos suficientes como para recibir honores pese a su temprana edad, 17 años.
Porque se es de Valdemorillo por nacimiento, caso de Esperanza Nogal, y también de corazón, como prueban el resto de nombres que hoy pasan ya a formar parte de la historia local por derecho propio; la científica Margarita Salas, que en su día fijó residencia en este pueblo, un hogar que por sus muchas obligaciones profesionales hubo de relegar a períodos vacacionales durante otra parte de su vida; Fernando García, boticario que supo ser un auténtico y gran servidor de sus convecinos, prestándoles atención permanente, escuchándoles, regalándoles mucho de su conocimiento y tesón; y Pepa Garrido, mujer que hasta el pasado octubre siguió subiéndose a escena, capaz de hacer de sus iniciativas verdaderos logros para esta localidad.
Comenzó el encuentro con el no menos emotivo recuerdo en memoria de Antonio Laborda, Cronista Oficial de esta villa, fallecido esta misma semana, por el que se guardó un respetuoso minuto de silencio.
Santiago Villena, como Alcalde, se encargó de cerrar un acto tan especial para todos, subrayando el orgullo que representa para Valdemorillo el poder contar entre sus habitantes con personas como las distinguidas en este 2020, “porque es un verdadero honor para nosotros sumar su ejemplo, en el que hemos de saber mirarnos para contribuir igualmente a que nuestro pueblo siga creciendo y mejorando”.